que jóvenes eramos cuando creímos vivir la vida juntos,
y de la noche a la mañana se derrumba la vida.
muere el amor, mueren los proyectos...
muere el alma.
que jóvenes nos veíamos caminando de la mano,
creyendo que seria así, o por lo menos así lo quería,
y en un segundo,
envejecieron nuestras almas a nuestro amor,
envejeció la complicidad, murió y se pudrió.
que jóvenes nos veíamos con nuestros hijos al caminar,
hermosos y maravillosos hijos,
lastima que solo hayamos servido para procrear,
y no para crear y criar nuestro amor.
que jóvenes seguimos siendo,
creciendo...
lastima que crezcamos a solas,
y no en la sinergia de amor que cuando niño imagine para nosotros.
y de la noche a la mañana se derrumba la vida.
muere el amor, mueren los proyectos...
muere el alma.
que jóvenes nos veíamos caminando de la mano,
creyendo que seria así, o por lo menos así lo quería,
y en un segundo,
envejecieron nuestras almas a nuestro amor,
envejeció la complicidad, murió y se pudrió.
que jóvenes nos veíamos con nuestros hijos al caminar,
hermosos y maravillosos hijos,
lastima que solo hayamos servido para procrear,
y no para crear y criar nuestro amor.
que jóvenes seguimos siendo,
creciendo...
lastima que crezcamos a solas,
y no en la sinergia de amor que cuando niño imagine para nosotros.