Esta noche en que todo es silencio, en la que también tengo una luna llena que alumbra este acogedor refugio que me ha otorgado un techo para sostener mis alocadas ansias de recorrer paso a paso la imponente montaña que tengo en frente.

Es ahora cuando recuerdo a mi familia, amigos y gente que estimo. en cada uno de ellos existe una fuerza vital que rescato para hacer de esta aventura una necesaria recarga emocional, mental y espiritual ( aun que mi cuerpo es el mas afectado), que servirá tanto para mi como para quienes necesiten de la energía que llena el alma y que hace nace aquí, en esta tierra lejana pero con una magia que inunda el corazón.

Solo, en medio de este valle, suelen escucharse voces que se pierden en el bosque... nada real que la razón contenga. son solo el viento, los ríos, las aves y algun desprendimiento de nieve que cae, haciendo de su sonido, un eco que se nezcla con las voces de la montaña.

Así es esta noche, un tanto fría, un tanto desolada, haciéndome sentir en lo inospito, pero a la ves llena de vida, vida que se respira, vida que esta en lo inmaterial que hace fluir el día y la noche, otorgando la magia del caluroso día, pero tamtien la noche que compaña con su luna llena y ellas, las estrellas que como un manto desplegado de luces, avisan que el amanecer será otro regalo, el perfecto regreso de una travesia hermosa.