Créeme que iría y regaría tu habitación con flores traídas del lugar de donde imaginas tus sueños, créeme que buscaría entre todas las montañas, las mejores praderas para el descanso de tus ojos. No pretendo contenerme, no puedo contenerme!, es vida propia que tiene este corazón y que se alimenta con lo que respiras, con aquella huella marcada como palabra en la conciencia.
“dame la vida de tus ojos,
Déjame ser quien descubra la naturaleza,
El ser que vuela por los parajes de tu conciencia.
Ahora tengo la magia que tiene un beso,
Ahora existo aquí y puede que desaparezca,
más, por la vida de tus ojos,
centinela seré de tu arrullo"